El propio Newton sospechó la inestabilidad del mundo, pero descartó la idea porque la encontró insoportable. (Ilya Prigogine)

Ilya Prigogine, el físico belga de origen ruso, demostró que “el no-equilibrio es generador de tiempo, de irreversibilidad y construcción”, algo que es esperanzador se mire por donde se mire si asumimos a modo de ejercicio que los sistemas económicos también juegan con la entropía.

Ilya Prigogine continua diciendo: “El alejamiento del equilibrio nos reserva sorpresas. Nos damos cuenta de que no se puede prolongar lo que hemos aprendido en estado de equilibrio. Descubrimos nuevas situaciones, a veces más organizadas que cuando hay equilibrio: se trata de lo que yo llamo puntos de bifurcación, soluciones a ecuaciones no lineales. Una ecuación no lineal admite frecuentemente varias soluciones: el equilibrio o la proximidad al equilibrio constituye una solución de esa ecuación, pero no es la única solución”.

Ya lo comentamos en el texto anterior, el equilibrio inestable es la única forma de mantenerse erguido, y como si viajáramos sobre una bicicleta, el movimiento es la clave. 

Si nos movemos encontraremos una solución. No será la única pero es una solución. ¿Será la más factible? Seguramente no, pero nos permitirá seguir en movimiento para aguardar el siguiente e inevitable cambio.

Pero Prigogines aún tiene más cosas que apuntar: “¿Cómo tratar este mundo inestable? En vez de pensar en términos de trayectorias, conviene pensar en términos de probabilidades. Entonces, se hace posible realizar predicciones para grupos de sistemas. La teoría de caos es algo semejante a la mecánica cuántica”.

¿Y qué es la probabilidad? La probabilidad es riesgo, posibilidades de acierto y de fallo, tomar los datos disponibles, las señales, y llevarlos al papel para determinar las expectativas de error. La probabilidad significa apuesta, implica tomar decisiones complejas calculando líneas de tendencia y porcentajes. O por intuición. Tu eliges.

Lo que verdaderamente parece factible es que si somos capaces de interpretar las señales, la solución será plausible y con altas posibilidades de obtener beneficios. Entonces cabe peguntarse si para se está debidamente preparado para continuar. ¿Sabes tomar decisiones complejas? ¿Podrás poner en marcha las acciones necesarias para adoptar la solución? ¿Está tu equipo preparado para hacerlo en tiempo y forma?

No te equivoques, estamos hablando de talento. Talento para aprender, medir, analizar, pensar y ejecutar. En realidad el talento de tu equipo son los materiales de que están hecha la bicicleta. Son la goma y la forma de los tacos de las ruedas, son el diseño y la fibra del cuadro, son los piñones y el cambio de velocidad. Todos ellos te dan robustez y agilidad al mismo tiempo. Te hacen flexible para afrontar imprevistos sin perder adherencia. Te permiten coger velocidad en los buenos tiempos y potencia cuando todo se hace cuesta arriba. 

¿Estás aprovechando todo el talento de tu empresa? ¿Hay talento enfocado en ventas? ¿Cómo lo conseguirías con la mínima inversión?

David Muñoz