Como he comentado en otras publicaciones, nos movemos en un ambiente altamente competitivo, rodeados de un gran número de rivales potenciales, por lo que debemos buscar, precisamente, ventajas competitivas y una forma de lograrlas es a través de la diferenciación que supone mejorar nuestra imagen corporativa.

Veamos algunas de las ideas más efectivas para crear un impacto positivo en nuestro entorno:

Actos Solidarios. Por ejemplo, podemos crear una beca o destinar dinero a fundaciones u ONG. Sin duda esto mejorará la percepción de nuestra organización por parte del cliente.

Crear un club, se trata de una forma de fidelización de nuestros clientes en el que podemos crear una tarjeta en la que el cliente vaya obteniendo ventajas en función del volumen de compras que alcance.

Sensibilización Medioambiental. El cambio climático está de actualidad y nos preocupa y afecta a todos por lo que adoptar iniciativas para la conservación del medio que habitamos será recibido de forma muy positiva por el entorno.

Una idea muy eficaz es dar a conocer nuestra historia. Un modo de hacerlo es contactar con un periodista para que nos haga una entrevista, o bien publicarla nosotros mismos en las redes sociales donde explicaremos tanto los orígenes de la organización como los nuestros. Esto mostrará nuestro lado más humano y conseguirá que se nos vea como alguien mucho más cercano, lo que inspirará mayor confianza a los clientes potenciales.

También podemos realizar eventos solidarios con empleados y clientes. El propósito de estos eventos es obtener un mayor impacto trabajando de forma directa con nuestros clientes, implicándolos en nuestras actividades solidarias, para que participen de forma activa en ellas.

Hacer rutas de promoción del producto. Nos servirá para acercar el producto a los clientes, sin necesidad de que ellos acudan a nosotros. Debemos estudiar nuestro mercado y diseñar estas rutas en las zonas donde potencialmente podamos obtener una mayor captación de clientes.

Otra posibilidad es celebrar días de puertas abiertas. Así enseñamos a nuestros clientes en qué trabajamos y cómo lo hacemos. El propio cliente se sentirá más seguro si puede ver con sus propios ojos de dónde sale lo que posteriormente acaba adquiriendo.

Organizar campañas de marketing callejero, consiste en salir a la calle y enseñar nuestro producto. No se necesita mucho presupuesto ni mucha organización para ello, pero tiene bastante impacto, ya que resulta algo llamativo.

Asimismo, podemos buscar sinergias, esta idea es muy interesante para las pequeñas y medianas empresas. Consiste en asociarse con otra empresa que produzca algo complementario a nuestro producto, y así ofrecer a los clientes un servicio más completo.

Realizar patrocinios también requiere un desembolso económico, pero es una opción de publicidad muy interesante para que nuestro negocio llegue a oídos de muchas personas. Existen multitud de opciones, como puede ser patrocinar un club deportivo o cualquier tipo de evento.

Por último, existe la opción de crear eventos especializados. Esto puede atraer a clientes exigentes, que después se convertirán en los más fieles: si les ofrecemos lo que realmente necesitan, nos tendrán siempre como su primera opción.

Una vez repasadas las actuaciones de más impacto que podemos llevar a cabo en nuestro entorno, queda en nuestras manos decidir las que queremos realizar. Lógicamente, tendremos que atenernos a los criterios de presupuesto que hayamos establecido y al alcance que queramos conseguir con cada una de estas acciones.

Si tienes dudas de cuál de éstas posibilidades encaja mejor con tu negocio o cómo llevarlo a cabo eficazmente contacta con Renovapyme, ¿A qué esperas para mejorar tu imagen corporativa y aumentar tú ratio de clientes?